miércoles, 23 de marzo de 2011

¡FRENA!

Día normal de clases y hace unos días mi papá me había dejado el carro para que manejara sola con mi soledad, sin nadie que me gritara: ¡FRENA!, o el típico: "no te pegues tanto a los carro", o también: " por ahí no". Bueno, el caso que desde los 16 años fui a mi curso de manejo y saqué mi licencia, bueno, permiso para los petits, entonces hasta los 19 años me prestaron el carro form hell, que no es nada más y nada menos que una "mamivan".



Cadillac Beauty

Sí, sí, ya les dije que carro era, pero ustedes imagínense que es este, ¿va?


El caso que después de mi día super apurado por clases y laboratorio, mi mamá me esperaba en casa para que la llevara a Wal-Mart, y no precisamente a tomar fotos para People of Wal-Mart, que hubiera sido cool, pero no llevaba cámara.


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Entonces llego por mi mamá y vamos al super, llego al estacionamiento y como NOOB del volante sintiéndome bien cool porque ya soy niña grande y sé manejar, entonces me quedo donde no hay muchos carros, porque he de confesar que no sé estacionarme (sí, ¿y qué?), entonces encuentro uno que me gusta y doy vuelta al volante:
 - Voy bien, no viene nadie, no he atropellado a nadie, no he chocado con nad... CRASH!!!...
Y como mi sinapsis me falló,  le aceleré más y se escuchaba más feo el golpe. Entonces cuando mi cerebro entendió que debía de quitar el pie del acelerador, rápidamente frené y me bajé del carro para ver qué demonios había hecho, entonces con el miedo del choque no supe que hacer.

Mientras tanto, enfrente del carro un señor me ve chocar y rápidamente va a contar el chisme, ya saben, el típico que le llama a la policía y sálala, entonces quien sabe de dónde llega un muchacho y se pone a ver el carro al que choqué y rápidamente, mi cerebro reaccionó impresionantemente y le dije al muchacho que nada le pasó a su carro, que no anduviera de nena lloriqueando, que el golpe fue en mi puerta y ni un rasponcito le quedó en el otro carro, ya saben, los carros de antes si aguantaban golpes, ahora la fibra de vidrio se hace añicos.

No nos quedó más remedio que entrar a la tienda comprar rápido lo que buscaba mi mamá e irnos. Cuando salimos de la tienda, llego a mi carro recién chocado y por la entrada de la plaza donde está el super veo una patrulla llegando al lugar, se estaciona muy cerca de mi carro y lo único que se me ocurrió decir fue: -¡Mamá, súbete al carro pero YA! Rápidamente sacamos las bolsas del carrito del super y nos subimos al asiento, mientras el policía se baja del carro y empieza a caminar. Seguía caminado y milagrosamente, como si fuera una de esas cosas divinas de las que habla la gente, el policía entra a un cajero automático que está en la plaza, mientras yo prendo el carro y me dedico a salir del estacionamiento, esta vez sin chocar, casi casi huyendo de la escena del crimen.


 Y esa es la historia que tenía pendiente de platicarte querido blogcito, que entre exámenes, prácticas, reportes, laboratorios y demás no he podido contarte, además que mi calendario se comió el mes de Febrero, así que necesito ponerme a terminar todos mis pendientes.

Nos vemos luego, xoxo.

3 comentarios:

Guillermo Rojas dijo...

Bueno espero que tengas mas cuidado...

Te dire que a penas el miercoles pasado conducia mi moto (rumbo a la universidad) a baja velocidad y un coche me rebaso por la derecha (cosa que no se debe de hacer..) y me tiro de la moto, asi que termine ese miercoles muy adolorido pues vole un par de metros, llego una ambulancia por mi y pues ya sabes llegue a la cruz roja y todo un protocolo de chequeos...

Pero todo esta bien con el pequeño detalle que me duele la espalda, el cuello y sobre todo mi cadera que fue la que golpeo el piso primero...

Saludos =)

Mnemonic dijo...

Hola.. me parece buena anecdota, esperemos que no sea costumbre.. por que todos cuando cometemos ilicitos, tenemos delirio de persecusion,,

por cierto.. tu carro tiene fibra optica?,,

lo mas común es de fibra de vidrio...

Patricia dijo...

Ups, corregiré eso, quien sabe en qué andaba pensando cuando escribí eso.

Y si, gracias, trataré que no sea costumbre, he tenido mucho cuidado desde entonces.
Espero no tenga consecuencias ese golpe de cadera Guillermo, y muchas gracias por comentar.

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