Esto de dormir bien me cuesta mucho trabajo, y aún no lo logro, y creo que experimentar para poder dormir más en periodo de exámenes finales va a ser MUY interesante.
Aunque me dan ganas de hacer el experimento de olvidar todas mis contraseñas de redes sociales, así no perder tanto tiempo y ver si puedo enfocarme a hacer algo. Justo ahora, aparte de estar escribiendo, debería estar haciendo unos reportes de laboratorio, pero acá estoy tratando de despejarme un poco y hacer tiempo para poder escribir un post este día, hoy que no pasó nada trascendente ni en mi vida ni en la vida de Hermosillo, sólo se me cruzó por la cabeza escribir algo, lo que sea, algo corto.
Entonces, acá va la lista de los malos hábitos:
1.- No dormir. Es verdad, no duermo. Desde los 12 años, duermo menos de 5 horas, cuando bien me va 6, y cuando me aplico duermo unas ocho, y eso se ve en mi salud y mi aspecto físico.
2.- No caminar. Por no salir de la zona confortable, muchas veces me quedo en casa y veo que hay en Internet. He aprendido bastantes cosas, pero no moverme me deja una (muy) mala salud.
3.- Idealizar. Hay momentos en que no puedo dejar de idealizar algo y cuando la realidad se pone en mis ojos, ahí vienen los problemas...
4.- Abarcar todo. Siempre en la escuela era la primera en levantar la mano para contesta, preguntar, pasar al pizarrón (en algunas materias) ser voluntaria en hacer algo, entrar a alguna clase extra, clubs, exposiciones, ferias, danza, baile, hubo un tiempo en que fui a basketbol y voleibol, seminarios, ayudar al maestro/a, ayudar en cuestiones técnicas, servicio social... Bueno, muchas muchas cosas que he hecho, y lo he disfrutado mucho, pero hay veces que me presiono demasiado queriendo hacer mil cosas a la vez, y la verdad es que nadie puede hacer diez mil cosas a la vez, no le pones atención a las diez mil al mismo tiempo, no disfrutas las diez mil cosas al mismo tiempo, entonces eso tiene que cambiar un poco.
5.- Drama. Oooh si, soy la reina del drama y nadie me quita mi puesto, así que tendré que tirar la corona y renunciar a mi reinado.
6.- Procrastinación. El hábito de dejar todo para lo último, el hábito que debería ser pecado.
7.- Déficit de atención. Cuantas veces no he estado leyendo un blog, que me lleva a otro blog, que me lleva a un video, que me lleva a otro blog o página, que me lleva a muchos muchos lugares en internet, menos a donde debería fijar mi atención. Muchas veces he estado a punto de ponerle fin a eso y cerrar todas mis cuentas. Pero todavía me resisto, primero cierro mi cuenta y hago el mayor esfuerzo por no volver a abrirla. Ya cuando es muy necesario, apago el wireless de mi laptop y así se apaga un poquito de mi ansiedad.
8.- Desear. Muchas veces veo cosas y me siento mal por no poder tenerlas, o voy a una tienda y quiero todo, muchas veces voy a una tienda y compro lo primero que veo sin ver otras opciones, sólo por el deseo de tener eso que estoy viendo en ese preciso momento. O muchas veces quiero viajar, conocer muchas cosas, pero no es el momento o no puedo realizarlo en ese momento, así que me siento mal deseando cosas que no pueden pasar, así que vuelvo a la realidad. Y si, es muy fácil cerrar los ojos o la mente y apegarte a lo que tienes, pero se convierte en un mal hábito si lo realizas por un buen rato, así que pretendo estar más enfocada.
9.- Junk food!.- Puedo jurar que tú también tienes este problema. Y es que a veces para aguantar mi día como mucha azúcar para estar alerta y no quedarme dormida, o poder realizar alguna actividad. Estoy de ninguna manera es bueno, yo lo sé, pero en casos de emergencia (que últimamente se están haciendo constante) uno necesita unas mantecadas con nuez para aguantar dos horas de clase de biología celular, que cada diapositiva que pasa la maestra parece que te avienta en la cabeza con un libro, o un dulce para que entre la hiperactividad que la bendita glucosa crea mágicamente (es un decir, no crean en la pseudociencia) entonces ya puedo terminar mis reportes de laboratorio, o hay veces que necesito de un sándwich a las 3 de la mañana para poder terminar un examen de biología celular o de cálculo para poder entregarlo a las 7 de la mañana de ese mismo día(esto sólo ha sido dos veces, no creas que lo hago todos los días), dónde el día anterior dormí mal y definitivamente ese día no voy a poder dormir. Pero bueno, créeme que estoy haciendo todo lo posible por cambiar eso. No quiero que aún escribiendo mi cumpleaños con el número uno al principio me de un infarto en la escuela por el estrés y mis venas tapadas y mi páncreas inútil.
10.- No acabar lo que empiezo. Ya te había comentado blogcito que últimamente tengo esa tendencia y justo ahorita iba a dejar sólo 9 puntos, pero el 10 es la clave, así que mejor termino este post, que me ha llevado más de lo que tenía planeado y mejor me pongo a terminar esos reportes de laboratorio.
Espero me compartas tus malos hábitos, y te desahogas un rato.
xo
Entonces, acá va la lista de los malos hábitos:
1.- No dormir. Es verdad, no duermo. Desde los 12 años, duermo menos de 5 horas, cuando bien me va 6, y cuando me aplico duermo unas ocho, y eso se ve en mi salud y mi aspecto físico.
2.- No caminar. Por no salir de la zona confortable, muchas veces me quedo en casa y veo que hay en Internet. He aprendido bastantes cosas, pero no moverme me deja una (muy) mala salud.
3.- Idealizar. Hay momentos en que no puedo dejar de idealizar algo y cuando la realidad se pone en mis ojos, ahí vienen los problemas...
4.- Abarcar todo. Siempre en la escuela era la primera en levantar la mano para contesta, preguntar, pasar al pizarrón (en algunas materias) ser voluntaria en hacer algo, entrar a alguna clase extra, clubs, exposiciones, ferias, danza, baile, hubo un tiempo en que fui a basketbol y voleibol, seminarios, ayudar al maestro/a, ayudar en cuestiones técnicas, servicio social... Bueno, muchas muchas cosas que he hecho, y lo he disfrutado mucho, pero hay veces que me presiono demasiado queriendo hacer mil cosas a la vez, y la verdad es que nadie puede hacer diez mil cosas a la vez, no le pones atención a las diez mil al mismo tiempo, no disfrutas las diez mil cosas al mismo tiempo, entonces eso tiene que cambiar un poco.
5.- Drama. Oooh si, soy la reina del drama y nadie me quita mi puesto, así que tendré que tirar la corona y renunciar a mi reinado.
6.- Procrastinación. El hábito de dejar todo para lo último, el hábito que debería ser pecado.
7.- Déficit de atención. Cuantas veces no he estado leyendo un blog, que me lleva a otro blog, que me lleva a un video, que me lleva a otro blog o página, que me lleva a muchos muchos lugares en internet, menos a donde debería fijar mi atención. Muchas veces he estado a punto de ponerle fin a eso y cerrar todas mis cuentas. Pero todavía me resisto, primero cierro mi cuenta y hago el mayor esfuerzo por no volver a abrirla. Ya cuando es muy necesario, apago el wireless de mi laptop y así se apaga un poquito de mi ansiedad.
8.- Desear. Muchas veces veo cosas y me siento mal por no poder tenerlas, o voy a una tienda y quiero todo, muchas veces voy a una tienda y compro lo primero que veo sin ver otras opciones, sólo por el deseo de tener eso que estoy viendo en ese preciso momento. O muchas veces quiero viajar, conocer muchas cosas, pero no es el momento o no puedo realizarlo en ese momento, así que me siento mal deseando cosas que no pueden pasar, así que vuelvo a la realidad. Y si, es muy fácil cerrar los ojos o la mente y apegarte a lo que tienes, pero se convierte en un mal hábito si lo realizas por un buen rato, así que pretendo estar más enfocada.
9.- Junk food!.- Puedo jurar que tú también tienes este problema. Y es que a veces para aguantar mi día como mucha azúcar para estar alerta y no quedarme dormida, o poder realizar alguna actividad. Estoy de ninguna manera es bueno, yo lo sé, pero en casos de emergencia (que últimamente se están haciendo constante) uno necesita unas mantecadas con nuez para aguantar dos horas de clase de biología celular, que cada diapositiva que pasa la maestra parece que te avienta en la cabeza con un libro, o un dulce para que entre la hiperactividad que la bendita glucosa crea mágicamente (es un decir, no crean en la pseudociencia) entonces ya puedo terminar mis reportes de laboratorio, o hay veces que necesito de un sándwich a las 3 de la mañana para poder terminar un examen de biología celular o de cálculo para poder entregarlo a las 7 de la mañana de ese mismo día(esto sólo ha sido dos veces, no creas que lo hago todos los días), dónde el día anterior dormí mal y definitivamente ese día no voy a poder dormir. Pero bueno, créeme que estoy haciendo todo lo posible por cambiar eso. No quiero que aún escribiendo mi cumpleaños con el número uno al principio me de un infarto en la escuela por el estrés y mis venas tapadas y mi páncreas inútil.
10.- No acabar lo que empiezo. Ya te había comentado blogcito que últimamente tengo esa tendencia y justo ahorita iba a dejar sólo 9 puntos, pero el 10 es la clave, así que mejor termino este post, que me ha llevado más de lo que tenía planeado y mejor me pongo a terminar esos reportes de laboratorio.
Espero me compartas tus malos hábitos, y te desahogas un rato.
xo
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